miércoles, 12 de octubre de 2011

#MiVidaUnaCartonera

En exactamente veintitrés días es mi cumpleaños. Honestamente toda mi vida me gustó cumplir años, hasta hace como dos meses que descubrí que es detestable. Me sobran razones por las cuales odio mi cumpleaños, voy a nombrar algunas nada más porque tampoco es mi intensión devastar sus vidas con mi lamentable vida. 
Primero, el año me pasó demasiado rápido y no creo haberlo disfrutado tanto como el año pasado. Pensemos que el año pasado estaba en quinto y que iba a fiestas y después al colegio, por lo que hacía lo que se me cantaba el orto. Digamos que según mi directora "con los terceros (quinto) se negocia y no se los obliga a nada" así que pueden imaginarse lo que hacíamos en las clases. Este año como si fuera poco estoy en mi primer año de facultad y justo da la casualidad que para esa fecha tengo parciales, por lo que no voy a poder juntarme a tomar el té con mis amigas siquiera. Voy a pasármela estudiando. Lo cual todavía no decido si es una genialidad de la vida o una maldición maya. 
Por otra parte, cada año que pasa voy empeorando: Estoy más gorda, más sola, más aburrida. Ayer casualmente empece el gimnasio pero de acá a veinte días voy a seguir siendo el mismo cerdito que fui todo el año. Deben quererme de todos modos. De novios ni hablar. Como ya sabrán soy experta en espantar hombres por lo que no espero conseguir uno en ese corto plazo, igual probablemente lo mandaría a cagar porque seguro de regalo de cumpleaños me querría regalar una rotura de orto a la cual yo no accedería. Con el orto no, man, es sagrado. (Hago un paréntesis para contar que "conozco" una mina que se deja romper el orto pero no se deja dar por adelante porque dice que quiere ser virgen hasta el matrimonio. Hija de puta. Trola culo roto, no puede ser más desubicada la forra. QUIERE SER VIRGEN CON EL CULO ROTO. Esas cosas no pasan, no en mi vida, no es aceptable. Bueno, solo era eso). El tema es que como les dije ni vería a mis amigas, las cuales quiero mucho pero no se si tengo ganas de juntarme y recordar que cumplo años y nos pongamos a hablar de años anteriores, de cosas del pasado cuales viejas mal cogidas y tristes. Además que ellas seguro me van a decir (no todas, ojo) que soy una "ortiva" porque no quiero hacer nada. Pero bueno, ya saben.. Cuando uno se pone grande ya el cuerpo no funciona como antes... Uno prefiere irse a dormir a las diez de la noche, tranqui. En fin, chicas please no me recuerden también que soy una ortiva. O por lo menos organicen algo y no me digan así voy. 
No quiero cumplir diecinueve años. Quiero morir. ¿Queda mal si ya empiezo a restar años? Igual es como que no da, porque si digo que cumplí dieciocho otra vez van a decir que estoy echa mierda para tener dieciocho. 
Otra razón para no cumplir años es la persona a la cual denomino "Forro hijo de puta mal formado que se cree un vivo importante". Siempre te pregunta cuantos cumplís y vos le decís, en mi caso diecinueve, a lo que el pelotudo te responde "¿Diecinueve? Jajaja pareces de quince". Ok, pedazo de sorrentino escupido por cartonero vos pareces de cuarenta y yo no te lo hago saber por educación. Lo que falta es que me diga que para mi cumpleaños me regala entradas para ver a Justin Bieber y ahí si que lo escupo yo.  El tema es que estoy cansada de esos chistes. O esos chistes que te hacen los familiares que estan más cerca de ver la luz blanca que yo en días de suicidios masivos. 
Tampoco pueden faltar los familiares que te llaman religiosamente para navidad, año nuevo, cumpleaños y esas fechas importantes. Eso sí, el día que tuviste un accidente y necesitas una transfusión no se acuerdan ni tu nombre. No solo con aguantarme a mis familiares tengo que aguantar a los amigos de mis padres, mayormente los de mi papá, que solo me vieron una vez en su vida y sienten esa necesidad de llamarme para contarme que me cambiaban los pañales. ¿Acaso mi mamá era tan forra que me dejaba que me cambie cualquier forro porque a ella le daba asco? ¿Eso es posible? Al parecer así fue. Hay uno de esos que vamos a llamarlo "Señor H". Todos los años me llama y pareciera que no sabe que me cae mal porque insiste en saludarme:

- ¿Hola?
- ¿Hola habla una nena rubiecita, pecosita que se llama Sol? ¿Sabes quién habla?
(Carajo para que mierda atendí es mi reacción inmediata)
- Hola, Señor H. ¿Cómo estas? (Honestamente me chupa tres carajos saber como estas viejo borracho pero bueno, papá insiste en que sea una chica educada y te atienda)
- Muy bien, gracias por preguntar. Llamaba para saludarte. Yo ya estoy viejo pero siempre me acuerdo de ustedes... 

Y ahí empieza un monologo de unos veinte minutos en los que yo no se que carajo hacer. No lo escucho y trato de cortarle lo más rápido posible. 
Creo y espero que todos me apoyen con mi conclusión: Cumplir años es para gente feliz y con mucho amor para recibir. Yo no soy feliz. Yo soy sola. Cumplir años no es la mejor opción en estos momentos.